La antropóloga Isadora Lins França es una de las autoras del libro “Prazeres Disidentes”, organizado por María Elvira Díaz-Benítez y Carlos Figari, a ser lanzado por el CLAM y la Editora Garamond en São Paulo en el 21 de octubre e en Rio de Janeiro en el 09 de noviembre. El libro reúne un buen número de jóvenes investigadoras e investigadores que vienen trabajando con las temáticas de sexualidad y género en Brasil y América Latina. Desde 2004, Isadora se ha dedicado a la exploración de un campo situado en la interfase entre sexualidad, género y consumo. Su tesis de maestría, titulada “Cercas y puentes: el movimiento GLBT y el mercado GLS en São Paulo”, fue defendida en el Programa de Post-graduación en Antropología Social de la Universidad de São Paulo. En este trabajo, la antropóloga analizó las relaciones de aproximación y distanciamiento entre movimiento y mercado, a partir de la investigación de campo realizada mayoritariamente en la Asociación de la Parada GLBT de São Paulo.
Actualmente, Isadora escribe su tesis de doctorado, desarrollada en el Programa de Doctorado en Ciencias Sociales de la Universidad de Campinas. El título del trabajo, aún provisorio, es “Consumiendo lugares, consumiendo en los lugares: homosexualidad, mercado y producción de subjetividades en São Paulo”.
En entrevista con el CLAM la investigadora habla sobre su artículo en el libro Prazeres Dissidentes y su investigación actual.
Su artículo se refiere a su investigación de doctorado producida a partir de la observación etnográfica de un samba GLS de la ciudad de São Paulo y de entrevistas realizadas con algunos de los frecuentadores de ese samba. ¿Cuál fue su objetivo en este trabajo?
Mi objetivo fue aproximarme a los mecanismos envueltos en la producción de subjetividades, de qué forma ellos las ejercen y cuáles son las negociaciones implicadas en ese proceso. En el análisis producido, también intento pensar cómo los sujetos aparecen racializados en ese espacio, cómo negocian diferentes estilos y pertenencias en su articulación entre diferentes lugares – que remiten también a convenciones de género y sexualidad muy propias – y los modos en que ese espacio se constituye en un “lugar”, o sea, cuáles son los significados simbólicos atribuidos a él en relación a un conjunto más amplio de lugares que integran el repertorio de sus frecuentadores, estén relacionados o no a la homosexualidad. Lo que me despertó curiosidad como investigadora, fue lo inusitado de la propuesta de un espacio dedicado exclusivamente al samba en vista de la predominancia de las variaciones de dance music en otros lugares. La compleja trama de relaciones entre marcadores de diferencia social que pude observar en aquel espacio, bien como la presencia de una estética black, me llevaron a elegir ese lugar como uno de los tres en que realicé mi investigación de campo.
¿Puede describir un poco más ese lugar que sirvió de escenario para la discusión emprendida en el artículo y cómo trabajó con los datos de campo?
Al atraer jóvenes de la periferia de São Paulo, el samba GLS es definido por mis informantes de campo como un lugar que les recuerda espacios del barrio, pero que se diferencia de ellos porque las personas se sienten tranquilas en relación a su sexualidad. Además, lo tienen como una alternativa a los bares gays, por la música y por el tipo de interacción entre las personas. Al ser frecuentado mayoritariamente por jóvenes de piel oscura, de diferentes tonalidades, es también un espacio marcado por una estética que remite a la idea de negritud estilizada, en la cual los cabellos parecen ser el trazo más distintivo. Esa estética se combina también a la relación que las personas establecen entre música, danza y color/raza en la producción del lugar. La danza, además de mediar situaciones de coqueteo, también asume ahí un papel fundamental para definir los “de dentro” y los “de afuera”.
En este artículo, además de la descripción que tuvo como base la observación etnográfica, también trabajo con la trayectoria de dos frecuentadores. Estas historias traducen, de cierta forma, dos construcciones bien marcadas, las cuales presentan cuestiones interesantes relativas a las posibilidades asociadas a jóvenes de piel oscura, nacidos y criados lejos del centro de la ciudad y que se relacionan con otros hombres. Me refiero a las subjetividades que se aproximan de la bicha (loca) y del mano, dos lugares posibles para eses sujetos. En el transcurso del análisis, contrastando esas dos trayectorias con las descripciones etnográficas, busco entender, inspirada en los términos de Stuart Hall, cómo nuestra identidad sexual “no nos constituye enteramente, somos siempre diferentes y estamos siempre diferentes y estamos siempre negociando diferentes tipos de diferencia”, entre ellas, la diferencia racial, de clase y género.
En su maestría también trabajó con el mercado GLS y con espacios de sociabilidad dirigidos a ese público. ¿En qué se diferencia esa investigación de su abordaje actual?
En la maestría pretendí comprender mejor las relaciones entre movimiento social y mercado de consumo por medio de la interacción entre actores tanto del movimiento como del mercado, o de ambos, considerando la intensa circulación en ese medio. De cierta forma, las cuestiones que me guiaron en la maestría continúan presentes, pues comprendo que en el ámbito del mercado se construyen identidades y experiencias que componen también el campo de acción del movimiento. Por otro lado, en esa investigación decidí focalizar más en la cuestión del mercado, especialmente de los espacios dirigidos a hombres que se relacionan afectiva y sexualmente con otros hombres. Asimismo, realicé una especie de mapa de los espacios comerciales de sociabilidad, tratando de entender cómo éstos se organizan en el espacio de la ciudad y cómo las personas se distribuían en ellos. En el doctorado dejo de privilegiar el mapa o panorama, y me concentro en lugares claves para la observación etnográfica y en la aproximación con informantes para entender cuál es el sentido que ellos atribuyen a esos lugares. Por otro lado, también quiero entender cómo acontecen procesos de diferenciación social y de producción de subjetividades a partir de lo que es consumido en esos lugares, considerando no apenas lo que se consume en términos literales, o sea, lo que se compra en los lugares de sociabilidad, sino también cómo los usos de objetos en esos ambientes median la interacción de las personas y cómo ellas manejan marcadores de diferencia social a partir de esos usos. Considero que ese abordaje es fundamental para comprender la producción de subjetividades relacionadas a la homosexualidad en un contexto de expansión, diversificación y segmentación del mercado en la ciudad de São Paulo, contexto que viene configurándose desde la década de los noventa. En ese sentido, la idea de que el consumo de los y en los lugares está articulado a procesos de producción de subjetividades, es lo que organiza mi propuesta y las preguntas ejes del campo de investigación.
A partir de esa perspectiva, ¿cómo organizó su investigación?
Seleccioné tres lugares-claves para la investigación de campo y procuré, en la medida de lo posible, seguir los itinerarios recorridos por los informantes y los lugares tenidos como referencias para ellos, lo que también me permite una visión más amplia del campo. Los lugares en que realicé la investigación son el samba GLS; una fiesta para osos (grosso modo pueden ser definidos como hombres gays, gordos y peludos) y sus admiradores; y un gran club de música electrónica. Todos los espacios son dirigidos a hombres que se relacionan afectiva y sexualmente con otros hombres y fueron seleccionados teniendo en cuenta el interés analítico que creo possen por su posibilidad de revelar interseccionalidades y diferencias en un terreno que yo ya conocía desde la maestría.